El conjunto de los Jardines de Murillo se encuentran situados entre la Avenida Menéndez Pelayo, la muralla de los Jardines de los Reales Alcázares de Sevilla y el barrio de Santa Cruz.
El conjunto de esta zona ajardinada se encuentra dividido en dos partes diferenciadas, el Paseo Catalina de Ribera y los jardines de Murillo propiamente dicho.
Los jardines de Murillo presentan una composición basada en caminos en retícula formados mediante setos y pavimentos que, en sus encuentros, crean glorietas de planta octogonal en las que se disponen fuentes centrales y bancos de fábrica recubiertos de azulejería. Los parterres resultantes están ocupados por densas masas de vegetación que otorgan al recinto un ambiente íntimo.
Entre los espacios abiertos destaca la glorieta dedicada al pintor José García Ramos que queda delimitada por arcos de entrada y muretes en los que existen paños de azulejos que recrean obras famosas de dicho artista, ejecutados por otros pintores del entorno del maestro como Miguel Ángel del Pino Sardá, Santiago Martínez Martín, Alfonso Grosso Sánchez, Manuel Vigil, y Diego López.
Uno de los puntos de más interés de los Jardines es su variedad botánica, donde se pueden encontrar magníficos ejemplares, por su edad y desarrollo de especies como la Magnolia grandiflora, Ficus macrophylla, plátanos híbridos, Cupresus sempervivens stricta, etc.
Estos jardines están declarados Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de jardines históricos.
Accesibilidad:
Los jardines están construidos sobre una plataforma única, aunque hay una zona con un desnivel que se representa por un escalón de varios centímetros de altura.
El suelo en algunas zonas está adoquinada, luego presenta algunas dificultades para las personas con movilidad reducida.