Se encuentran en el barrio de la Magdalena, en los sótanos del Centro Cultural Palacio de Villardompardo. Se trata de los baños árabes más grandes de toda Europa, así como los que mejor se han conservado en el tiempo. Es una prueba más del atractivo de Jaén como destino turístico. Se constituye como un lugar ideal para conocer de primera mano el paso de la cultura árabe por esta ciudad.
Fueron construidos en el siglo XI, aprovechando los restos de una casa o baño romano con pórtico. Tenían una doble función: por un lado eran un centro de reunión y por otro lado un centro de higiene. En cada sala de los Baños Árabes se alzan en ambos extremos dos alcobas separadas del resto con arcos de herradura sobre medias columnas. Dichas salas son el vestíbulo, la sala fría, la sala templada y la sala caliente.
La entrada es gratuita, por lo que cualquiera que lo desee puede acudir a visitarlos.
El acceso al edificio donde se encuentran los Baños Árabes se hace subiendo una rampa con cierta pendiente para después bajar otra rampa. En general, se pueden disfrutar todas las salas con escasa dificultad.
Hay una sala accesible donde se explica mediante un video cómo eran estos baños en su época de mayor esplendor.
Se pueden hacer fotos de todo, siempre y cuando no se use flash.
Hace unos años se procedió a su restauración para una mayor accesibilidad, lo que le sirvió para lograr el Premio Europeo Nostra.
Son muchas las personas que visitan los Baños Árabes cada año, pues es algo muy recomendable para cualquiera que pase por Jaén.
Accesibilidad
Hay ascensor así como rampas en cada planta como método alternativo a las escaleras. El ascensor no dispone de sistema de voz de aviso.
Se puede circular sin problemas por casi cualquier zona de los Baños, aunque quizás nos encontremos con algún pequeño escalón. Los paneles informativos y expositores son en general accesibles.
En cuanto al cuarto de baño más próximo, hay que destacar que el inodoro tiene dos barras de apoyo y que una de ellas es abatible. En general el lavabo es accesible.
En conjunto, el acceso ha mejorado mucho aunque, como todo, es mejorable y requiere mantenimiento.