La basílica de San Julián de los Prados, también conocida como Santullano, es una iglesia prerrománica de Oviedo de principios del siglo IX, y una de las principales muestras del arte asturiano. Fue declarada Monumento Histórico Artístico en junio de 1917 y Patrimonio de la Humanidad en 1998, dentro de la categoría "Monumentos de Oviedo y del Reino de Asturias".
Se encuentra un poco alejada del centro de la ciudad, al lado de la autopista A-6, si bien se puede llegar sin necesidad de desplazarse en medios de transporte.
Mandada edificar por Alfonso II el Casto en la primera mitad del siglo IX, esta iglesia es la de mayor tamaño que se conserva de todo el prerrománico español, siendo la mayor construcción cristiana peninsular hasta el siglo XI.
Es también el único edificio que nos ha llegado en buen estado de conservación de los muchos que Alfonso II levantó en Oviedo, al trasladar a esta ciudad su capital.
Su aspecto actual es fruto de una restauración llevada a cabo entre 1912 y 1915.
Su trazado es de planta basilical con tres naves, un transepto y tres pórticos, dos de ellos laterales.
Las naves están separadas por pilares y arcos de medio punto. Destacan las pinturas murales cargadas de símbolos y figuras geométricas, con una gran variedad de colores.
A día de hoy puede considerarse, tanto por su tamaño como por el casi perfecto estado en que ha llegado hasta nosotros, uno de los monumentos más importantes de todo el arte prerrománico español.
Alrededor de la iglesia, unos jardines muy bien cuidados que la rodean, le dan un toque idilico en un hermoso entorno. Lamentablemente pierde parte del encanto por su ubicación al lado de la autopista, que sin duda daña la imagen del conjunto.
No puede faltar en una visita a Oviedo.
Accesibilidad:
En el itinerario que conduce a la iglesia, la acera está rebajada.
En sus inmediaciones, el suelo es de losas de piedra y granito, homogéneo y compacto.
En la parte trasera, el sendero que rodea la iglesia es de tierra e hierba.
La entrada principal tiene tres escalones; ha sido habilitada una entrada secundaria por una puerta lateral, mediante una rampa con pendiente elevada. Se recomienda, por lo tanto, para usuarios de silla de ruedas, acceder con ayuda.
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